Hijo de peluquero, Raffel se caracterizaba por ser un “self-man”, es decir, un hombre hecho a sí mismo, con gran sencillez en torno a todo lo asociado con la creatividad, incluyendo el esculpir, pintar, escribir y hacer peinados, Pagès solía decir que se veía y sentía más como un creativo de imagen y no solo como un peluquero.
La cadena de peluquerías de Raffel Pagès es una de las más conocidas en Cataluña gracias a los servicios de peluquería y estética que destacan frente a otras cadenas de peluquerías, donde también se incluyen tratamientos faciales en Barcelona de gran calidad y con equipos de personas especializados.
Fallece el maestro peluquero Raffel Pages
Raffel Pagès, un ícono dentro del mundo de la peluquería y también un impulsor de centros de formación destinados al sector, falleció en Barcelona el 9 de mayo teniendo 78 años.
Pagès fue el fundador de la cadena de peluquerías con su mismo nombre, la cual actualmente está en manos de sus hijas Quionia y Carolina, quienes al mantener la esencia de sus establecimientos y servicios, permitirán que Raffel siga siempre presente en el mundo de las peluquerías.
Formación en París
Raffel Pagès tuvo una formación en el mundo de la peluquería dentro de Carita, en París, reconocida por ser la mejor peluquería a nivel global a lo largo de la década de los 70, debido a que consiguió un perfecto equilibrio entre cuerpo, imagen y peinado. Su tiempo en París le permitió encontrar su vocación, por lo que al volver a España tomó la decisión de llevar las tendencias parisinas que tan bien tuvo la oportunidad de conocer; razón por la cual creó su primer salón de belleza, situado en Barcelona.
Para el año 1992, fundó el Instituto de Perfeccionamiento Raffel Pages, su gran proyecto, destinado exclusivamente a la formación de sus colaboradores, pero que con el paso del tiempo, abrió sus puertas para otros profesionales del sector. Y es que para Pages, la formación se encontraba entre los puntos más importantes dentro de la vida de cualquier profesional; por lo que decía que había que aprender a lo largo de toda la vida, que él continuaba aprendiendo y que lo continuaría haciendo hasta sus últimos días.
De acuerdo con el propio Pagès, el secreto detrás de su indiscutible éxito se trataba de investigar, invertir, intuir y por supuesto, de innovar.
La cadena Raffel Pages, empresa familiar perteneciente a Comertia, como ya mencionamos, se encuentra hoy en día bajo la responsabilidad de sus dos hijas, quienes han tomado el mando del negocio, y actualmente es el lugar de empleo de más 300 trabajadores, en sus 80 salones ubicados alrededor de toda España.
De París a Barcelona
Al regresar a España desde París durante el 1975, decide fundar su primer salón, situado en Barcelona, específicamente en la calle Reina Elisenda; el cual permitió el comienzo de una expansión que se ha mantenido siempre en alza, y al que siguió la creación de 6 salones más.
Al ser cuna y esencia de lo que es la peluquería española, a lo largo de esta época y dentro de Barcelona existía una competencia bastante fuerte; sin embargo, la primera peluquería para mujer en Barcelona de Raffel Pagès logró alcanzar un nivel de éxito tan grande, que incluso fue reclamado para shootings tanto de revistas de moda como de publicidad.
Asimismo, durante esos años Pagès comienza a ser demandado por compañías, gremios, grupos y familias profesionales italianas, junto a las cuales colaboró, en alrededor de 200 ocasiones a lo largo de solo 10 años.
A causa de toda esta fama y reconocimiento, L’Oreal París, la principal marca de productos de peluquería a nivel global, decidió ficharlo para la presentación de sus colecciones por alrededor del mundo, logrando incluso convertirse en embajador de dicha marca, a la cual se sentía tan vinculado a nivel emocional que incluso solía decir que llevaba su ADN en su sangre.
Sin embargo, fue en el 1992 y en la Ciudad Condal, cuando finalmente comenzó su gran proyecto, el cual llegó a convertirse en la auténtica semilla que dio lugar a la gran expansión que experimento la marca Raffel Pagès.
Surge la peluquería emocional
Esta profesión para Raffel Pages, consistía en “el oficio de los diálogos y los silencios”, siendo precisamente a partir de esa perspectiva que desarrolló la “Peluquería Emocional”, que implica que además de llevarse a cabo con las manos, también se realiza con las emociones.
Durante el año 2000, debido a su gran pasión por la innovación, dio inicio a una nueva marca conocida como Teentrends by Raffel Pages (T&T), la cual presentaba un novedoso concepto de peluquería tanto emocional como transgresora; que fue descrita como “chic subversivo” por el propio Pagès.Esta nueva marca supuso un estallido tanto de creatividad como de los sentidos estéticos, al determinar pocas diferencias entre la imagen de hombres y la de mujeres.
Y es que cabe señalar que tanto en la creatividad como en las técnicas en cortes, colores y peinados, sin importar lo que se pueda decir, en realidad no existen grandes diferencias; dado que únicamente hay una gran peluquería que posee ciertas particularidades de acuerdo al sexo y la imagen propia.
Y las nuevas generaciones de T&T solo refuerzan dichos conceptos, por lo que únicamente resulta importante la imagen final que se puede lograr.
Fundador del Museo de Historia de la Peluquería
Tras haber comenzado a coleccionar objetos de peluquería desde el año 1960, Raffel Pagès fue el creador del Museo de Historia de la Peluquería, situado en Barcelona, cuyo patrimonio está formado por más de 14.000 artículos diferentes.