¡Ah el sexo! Otra vez nosotros hablando de sexo. La verdad es que consideramos que el sexo es indispensable para tener una mejor salud y una gran calidad de vida y no somos los únicos en pensar así. De hecho, hay cientos de culturas antiguas en oriente y la Vieja América en donde se pensaba que el sexo era un momento de elevación.
El sexo y la salud
Culturas como la hindú o la asiática incluso se esmeraban en que el momento de tener sexo fuese perfecto, en especial para sus emperadores. Para ellos cuando llegamos al orgasmo nuestro cuerpo, mente y espíritu se fusionan haciéndonos llegar hasta donde llegamos con el sexo.
Sin embargo, el hecho de que el sexo sea magnifico no quiere decir que vaya a ser magnifico con cualquier persona con la que te acuestes.
Es más, para ser más específicos, ni siquiera va a ser siempre magnifico con la persona que elijas para pasar el resto de tus días, aparte de que el sexo está relacionado con la salud. Es en este último punto en el cual queremos concentrarnos en este artículo.
Suele pasar que después de un tiempo las parejas tienden a perder el apetito sexual haciendo que su relación se vaya a la basura y terminen separados o divorciados. Nosotros te vamos a dar 5 motivos por los cuales esto podría estar pasando par que aprendas a identificarlos y combatirlos lo antes posible ya que el amor no dura ni con hambre ni sin sexo.
El sexo, la salud y la monotonía
Puede que una noche de esas en las que estáis muy fogosos y conectados hagáis el amor de una forma que para vosotros sea como vuestra favorita.
Sin embargo, si comes azúcar todos los días vas a terminar empalagándote, lo mismo pasa con el sexo, cuando este es demasiado repetitivo y monótono la chispa tiende a apagarse con mucha facilidad.
Prejuicios morales
Desde que somos niños hemos sido bombardeados con mensajes que nos decían que el sexo antes del matrimonio es malo y pecaminoso.
Esto genera que muchas personas, en especial las mujeres, se cohíban de muchas cosas en la cama por el temor de ser percibidas como unas guarras. Esto puede llegar a ser un problema cuando una de las partes de la relación quiera experimentar y la otra tenga miedo o temor de hacerlo.
El egoísmo
Amigo mío, esto es para los hombres principalmente. El sexo es cuestión de dos y se supone que deberían disfrutarlo ambos.
Muchos hombres cometen el error de centrarse solo en ellos mismos, como se satisfacen antes que la mujer tienden a dejarlas tiradas con las ganas hasta el techo sin importarles mucho. Eso puede ser perjudicial en cualquier relación sexual ya sea abierta, cerrada o como sea.
Baja autoestima
El sexo es también una forma de lenguaje. Si eres una persona con una autoestima poco saludable e insegura, posiblemente lo reflejes también en el sexo. Eso será percibido rápidamente por tu pareja y hará que el sexo sea una experiencia más pesada que satisfactoria.