La heroína se trata de una droga ilegal sumamente adictiva, la cual representa un grave problema no solo para la persona que la consume, sino también para quienes se encuentran en su entorno, e incluso para el resto de la sociedad en general.
Efectos de la heroína en el organismo
Es importante mencionar asimismo, que el consumo de dicho opioide, suele causar adicción en muy poco tiempo y por lo general, también suele llevar a la sobredosis, por lo que supone un gran riesgo para la vida de los consumidores.
Esta droga tiene la capacidad de activar un sistema del organismo conocido como “sistema opioide”, el cual se encarga de regular diversos procesos psíquicos y físicos de gran importancia, por ejemplo, la sensación de satisfacción, de placer, el control del dolor e incluso, de las funciones cardiovasculares y respiratorias.
Dicho sistema suele producir ciertas sustancias naturales denominadas “opioides endógenos”, que produce efectos que generalmente son imitados por la heroína.
De este modo, el consumo de heroína permite activar el sistema opioide de manera antinatural, generando cambios dentro del cerebro los cuales fomentan la necesidad de consumir constantemente dicha droga, debido a que al interrumpir su administración suelen presentarse síntomas de abstinencia.
Antes de hablar sobre los efectos de la heroína, es importante mencionar que la misma consiste en un producto semisintético y que pese a derivarse de la morfina, no tiene usos médicos, razón por la cual únicamente es posible conseguirla dentro del mercado ilegal.
También es preciso decir que hay dos clases de heroína, una es la heroína blanca que tiene una mayor pureza y la otra es la heroína marrón que la tiene menor y en consecuencia, un mayor nivel de toxicidad.
En ambos casos, el consumo de esta droga causa 2 tipos de efectos, tal y como explicamos a continuación:
Efectos inmediatos
- Durante la primera etapa (conocida como “luna de miel”) después del consumo existe un “flash”, es decir, una sensación de placer sumamente intensa que tras algunos segundos, se convierte en un completo estado de sedación junto a un poco de euforia, con total ausencia de malestares psíquicos.
- Generalmente dura alrededor de 2-3 horas y va desapareciendo de manera gradual.
- Después de estos efectos iniciales, por lo general la persona suele sentirse somnolienta o adormilada durante algunas horas, mientras que sus funciones mentales se encuentran nubladas.
- Asimismo, la función cardíaca se vuelve más lenta e igualmente disminuye, en gran medida, el ritmo respiratorio, llegando en ciertos casos al punto de poner la vida en peligro.
Ahora bien, en cuanto al nivel físico, la heroína suele causar ciertos efectos inmediatos, como los mencionados a continuación:
- Reducción del tamaño de las pupilas.
- Boca seca.
- Constipación intestinal.
- Reducción del ritmo respiratorio.
- En grandes dosis incluso, podría causar el fallecimiento por depresión respiratoria.
Efectos a largo plazo
- El continuo consumo de heroína, a largo plazo, suele modificar no solo la estructura física, sino también la fisiología del cerebro, por lo que puede llegar a generar desequilibrios prolongados tanto en los sistemas neuronales como hormonales, los cuales suele ser bastante complejo revertir por completo.
- De acuerdo con diversas investigaciones, el consumo de esta droga genera cierto nivel deterioro en la materia blanca del cerebro, lo que en consecuencia, podría llegar a afectar no solo la capacidad de las personas para regular su conducta y su habilidad para la toma de decisiones, sino también sus respuestas frente a situaciones estresantes.
- De igual manera, el consumo de heroína puede provocar grandes niveles tanto de dependencia física como de tolerancia.
- En el caso de la tolerancia, se presenta al precisar cada vez una mayor cantidad de esta droga para poder conseguir los mismos efectos.
- Mientras que la dependencia física, ocurre cuando el organismo termina acostumbrándose a la presencia de la heroína en el cuerpo y al disminuir su administración aparecen síntomas de abstinencia.
Ahora bien, los efectos que aparecen a largo plazo por el consumo de heroína, después de haber desarrollado dependencia y tolerancia a dicha droga, son los siguientes:
- Trastorno en el sistema nervioso, promoviendo el desarrollo de trastornos de atención, de la memoria y/o insomnio.
- Alteraciones cardiovasculares y sanguíneas, llegando incluso a desarrollarse anemia.
- Afecciones digestivas que causan estreñimiento.
- Trastorno en el ámbito nutritivo, causadas como consecuencia de los desórdenes en la alimentación y pérdida de peso.
- Alteraciones psicológicas, por ejemplo, depresión, apatía o egocentrismo.
- Problemas ginecológicos, generando trastornos tanto de ovulación como de la menstruación.
- Incremento en el riesgo de parto prematuro, aborto e incluso de alteraciones en los bebés.
Síntomas de abstinencia
En cuanto a los síntomas de abstinencia en el consumo de heroína, se puede decir que es posible que los mismos aparezcan después de un par de horas tras la última administración de la droga.
Dentro de dichos síntomas se encuentran, por ejemplo, dolor óseo y/o muscular, desasosiego o inquietud, escalofríos y “piel de gallina”, insomnio, vómitos, diarrea y movimientos involuntarios de las piernas.
Los principales síntomas de abstinencia suelen hacer un pico unas 24-48 horas tras el último consumo, y se reducen casi alrededor de una semana después.
No obstante, algunas personas pueden padecer síntomas de abstinencia persistentes por varios meses.
Finalmente, su administración constante suele generar un trastorno por consumo de heroína, que supone un padecimiento crónico recidivante (con recaídas) el cual se encuentra más allá de la dependencia a la heroína.