Existe un trastorno que afecta el color en los dedos de las manos y pies, y que en los últimos años ha crecido más. Se trata de una enfermedad que se debe conocer para saber cómo tratarla, y cuáles son las consecuencias negativas que afectan la salud y el bienestar.
Lo que se sabe del síndrome del dedo blanco
El síndrome de dedo blanco, también conocido como el fenómeno de Raynaud en honor a Maurice Raynaud, es una enfermedad que provoca una alteración en la contracción de los vasos sanguíneos, mayor al normal.
Esta contracción provoca el cambio de color en los dedos de manos y pies, los cuales adquieren un tono blanco o azul en temperatura bajas, y un tono rojo por causa del recalentamiento.
Cuando vuelve el valor a los dedos, además de enrojecerse, se genera una sensación de hormigueo y palpitación. Sin embargo, en los casos más graves de pérdida de flujo sanguíneo, es posible sufrir de muerte en los tejidos o formarse llagas.
Por lo general, al exponerse al frío o bajas temperaturas, los vasos sanguíneos se estrechan o contraen para reducir la pérdida de calor en el cuerpo, cuidando de los órganos vitales.
Las personas que sufren de este trastorno, la contracción de los vasos sanguíneos es excesiva, esto se le conoce como vasoespasmos, y provoca una reducción dramática del flujo de la sangre.
¿Qué causa este trastorno?
Con respecto a la enfermedad de Raynaud, existen dos tipos, el primario y el secundario. En el trastorno primario no existe una causa o explicación que se pueda asociar a los síntomas del trastorno.
En el trastorno secundario, se debe a la existencia de otros problemas médicos, o por otras causas de espasmos en los vasos sanguíneos de los dedos de manos y pies.
El tipo primario no cuenta con evidencia científica que indique el motivo de su aparición. Sin embargo, se sabe que aparece con determinadas enfermedades, como en pacientes con esclerodermia, lupus, artritis reumatoide y otras enfermedades autoinmunes reumatológicas.
Además, las mujeres menores a los 30 años pueden sufrir más del Raynaud primario, es decir, sin ninguna causa aparente.
Por otro lado, el trastorno Raynaud secundario se produce mayormente con la existencia de otras enfermedades médicas. Hay fármacos que provocan este síndrome y se manifiesta en una edad superior a los 30 años.
Las personas que viven en climas fríos tienen más posibilidades de desarrollar esta enfermedad por causa de la baja temperatura del ambiente, al igual que pacientes con familiares que sufren o sufrieron de esta enfermedad.
Principales síntomas del dedo blanco
Hay varios síntomas que se presentan en las personas que sufren de este trastorno, y el principal es la decoloración de los dedos a causa de la constricción de las arterias. La duración de esto puede ser de entre varios minutos u horas.
Los dedos afectados con el síndrome adquieren un aspecto pálido o azulado, este último se conoce como cianosis.
El síndrome puede afectar un solo dedo o varios de la mano o de los pies. Aunque no hay dolor en los dedos, es posible sentir entumecimiento, ardor y hormigueo en los dedos blancos.
Al finalizar el episodio del trastorno, las zonas de los dedos afectadas se quedan con un aspecto rojizo o azulado.
Cuando los episodios del trastorno son más frecuentes y duran más tiempo, lo cual es común en personas con esclerosis sistémica, en la piel de los dedos se nota un aspecto más brillante, liso y tirante.
En el peor de los casos, en las yemas de los dedos aparecen llagas dolorosas que pueden infectarse si no se cuidan bien.
¿Cómo se diagnóstica el trastorno?
Lo más recomendado es ir con un reumatólogo profesional, que podrá realizar un examen detallado y preciso para determinar que se sufre de este trastorno.
El especialista evalúa los diferentes síntomas que sienten las personas, realiza un examen médico general, y procede a realizar análisis generales y específicos. La finalidad de esto es comprobar que no existen otros trastornos inmunológicos o enfermedades que provoquen el síndrome del dedo blanco.
Entre las pruebas que se realizan para diagnosticar el trastorno está la capilaroscopia, donde se usa un microscopio digital para localizar las anormalidades vasculares en los dedos.
También es posible realizar una ecografía Doppler antes y después de exponer los dedos al frío. O bien, un examen de sangre que permita detectar otras posibles enfermedades que causen el síndrome.
¿Cómo tratar este problema?
Hay varias maneras de tratar el trastorno de Raynaud cuando se presenta. Lo más importante es cuidarse del frío, las personas deben abrigarse correctamente si viven en un ambiente con bajas temperaturas.
Es recomendado gestionar y trabajar el estrés, esto ayuda a controlar mejor las crisis de este trastorno. Dejar de fumar es útil para controlar esta enfermedad, dado que la nicótica puede constreñir los vasos sanguíneos.
Otra manera de tratar el trastorno de Raynaud es tomando bloqueadores de canales de calcio, como el amlodipino, por ejemplo. También se puede tratar aliviando la enfermedad que lo produce.
Mediante la simpactectomía es posible aliviar los síntomas principales del síndrome, lo cual es útil cuando el trastorno es progresivo e incapacita a las personas el uso de sus dedos, o bien, cuando otros trastornos no funcionan.